lunes, 29 de noviembre de 2010

Continuando con el libro del Papa...




El progreso
Surge el problemático término “progreso”. La modernidad ha buscado su propio camino guiada por la idea de progreso y de libertad. Pero ¿qué cosa es el progreso? Hoy vemos que el progreso puede ser también destructivo. Por esto debemos reflexionar sobre los criterios que debemos adoptar para que el progreso sea verdaderamente progreso.

Un examen de conciencia
Más allá de los planes financieros, un examen de conciencia global es absolutamente inevitable. Y la Iglesia ha tratado de contribuir a esto con la encíclica “Caritas in veritate”. No da respuestas a todos los problemas. Quiere ser un paso adelante para mirar las cosas desde otro punto de vista, que no sea solamente el de la factibilidad y del suceso, sino desde el punto de vista según el cual existe una normatividad del amor por el prójimo que se orienta a la voluntad de Dios y no solamente a nuestros deseos. En este sentido se debería dar el impulso para que realmente ocurra una transformación de las conciencias.

La verdadera intolerancia
La verdadera amenaza frente a la cual nos encontramos es que la tolerancia sea abolida en nombre de la tolerancia misma. Existe el peligro de que la razón, la llamada razón occidental, sostenga haber finalmente reconocido lo que es justo y proponga así una pretensión de totalidad que es enemiga de la libertad. Creo que es necesario denunciar con fuerza esta amenaza. Ninguno esta obligado a ser cristiano. Pero ninguno debe ser obligado a vivir según la “nueva religión”, como si fuese la única verdadera, vinculante para toda la humanidad.

Mezquitas y burka
Los cristianos son tolerantes y en cuanto tales permiten también a los otros la particular comprensión de sí mismos. Nos alegramos del hecho de que en los países del Golfo árabe (Qatar, Abu Dhabi, Dubai, Kuwait) haya iglesias en las cuales los cristianos puedan celebrar la misa y esperamos que así suceda en todas partes. Por esto es natural que también entre nosotros los musulmanes puedan reunirse en oración en las mezquitas. 
En lo referente al burka, no veo razón para una prohibición generalizada. Se dice que algunas mujeres no lo llevan voluntariamente sino que en realidad es una suerte de violencia que se les impone. Está claro que con esto no se puede estar de acuerdo. Pero si lo quieren usar voluntariamente, no veo por qué se le deba impedir hacerlo.

Cristianismo y modernidad
El ser cristiano significa ser algo vivo, moderno, que atraviesa toda la modernidad formándola y plasmándola, y que por tanto en un cierto sentido verdaderamente la abraza. En esto es necesaria una gran lucha espiritual, como he querido mostrar con la reciente institución de un “Pontificio consejo para la nueva evangelización”. Es importante que busquemos vivir y pensar el cristianismo en modo tal que asuma la modernidad buena y justa, y por tanto simultáneamente se aleje y se distinga de la que está convirtiéndose en una anti-religión.

Optimismo
Si se observa con más atención – y es lo que me es posible hacer gracias a las visitas de los obispos de todo el mundo y también en los otros muchos encuentros - se ve que el cristianismo en este momento está desarrollando también una creatividad del todo nueva […] La burocracia está terminada y cansada. Son iniciativas que nacen de dentro, de la alegría de los jóvenes. El cristianismo asumirá quizá un nuevo rostro, quizá también un aspecto cultural diferente. El cristianismo no determina la opinión pública mundial, otros son quienes la guían. Y sin embargo el cristianismo es la fuerza vital sin la cual también las otras cosas no podrían seguir existiendo. Por ello, sobre la base de lo que veo y de lo que llego a hacerme una experiencia personal, soy muy optimista respecto al hecho de que el cristianismo se encuentre frente a una nueva dinámica.

La droga
Muchos obispos, sobre todo los de América latina, me dicen que por donde pasa el camino del cultivo y la del comercio de la droga - y esto ocurre en muchos de aquellos países - es como si un animal monstruoso y malvado extendiese su mano sobre dicho país para arruinar a las personas. Creo que esta serpiente del comercio y del consumo de droga que envuelve el mundo es un poder del cual no siempre llegamos a hacernos una idea adecuada. Destruye a los jóvenes, destruye las familias, lleva a la violencia y amenaza el futuro de enteras naciones. También esta es una terrible responsabilidad de Occidente: tiene necesidad de drogas y así crea países que le proporcionen lo que luego terminará por acabarlos y destruirlos. Ha surgido un hambre de felicidad que no llega a saciarse con lo que hay; y luego se refugia, por decir así, en el paraíso del diablo y destruye completamente al hombre.

En la viña del Señor
En efecto tenía una función directiva, pero no había hecho nada solo y he trabajado siempre en equipo; precisamente como uno de los tantos obreros en la viña del Señor que probablemente ha hecho un trabajo preparatorio, pero al mismo tiempo es uno que no está hecho para ser el primero y para asumirse la responsabilidad de todo. Entendí que junto a los grandes Papas debe haber también pontífices pequeños que dan su contribución. Así que en aquel momento dije lo que sentía verdaderamente […] El Concilio Vaticano II nos ha enseñado, con razón, que para la estructura de la Iglesia la colegialidad es constitutiva; o sea el hecho de que el Papa es el primero en el compartir y no un monarca que toma decisiones en soledad y hace todo él mismo.


sábado, 27 de noviembre de 2010

VIGILIA POR LA VIDA NACIENTE


Es una decisión que resulta histórica, el Papa ha convocado para hoy 27 de noviembre a todos los católicos del mundo a una Vigilia de oración en defensa de la vida que se encuentra por nacer. Este mismo día el Santo Padre celebrará en la Basílica de San Pedro una solemne “Vigilia por la vida naciente” coincidiendo con las Primeras Vísperas del primer Domingo de Adviento en el marco de la cercana solemnidad de la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo.


La Vigilia comprenderá, además de las Vísperas, también la adoración eucarística, para agradecer al Señor que, “con el don total de sí mismo, ha dado sentido y valor a toda vida humana y para invocar su protección sobre cada ser humano llamado a la existencia”.

En el mensaje de convocatoria se señala que: “Todos nosotros somos concientes de los peligros que amenazan hoy la vida humana a causa de la cultura relativista y utilitarista que ofusca la percepción de la dignidad propia de cada persona humana, cualquiera que sea el estadio de su desarrollo. Estarnos llamados más que nunca a ser “el pueblo de la vida” (Juan Pablo II, Encíclica Evangelium vitae, n. 79) con la oración y el compromiso".

En Guatemala, los obispos han indicado que puede celebrarse esta Vigilia hoy mismo y también en otra fecha oportuna a cada parroquia.

jueves, 25 de noviembre de 2010

"Luz del mundo", por Benedicto XVI. Una Antología


Ofrecemos a continuación una selección de textos del libro-entrevista del Papa.

La alegría del cristianismo
Toda mi vida ha estado siempre atravesada por un hilo conductor que es el siguiente: el cristianismo da alegría, amplía los horizontes. En definitiva una existencia vivida siempre y solamente “contra” sería insoportable.

Un mendigo
En lo que se refiere al Papa, él también es un pobre mendigo frente a Dios, incluso más que los otros hombres. Naturalmente siempre le rezo ante todo al Señor, al cual estoy ligado, por decir así, por una antigua amistad. Pero invoco también a los santos. Soy muy amigo de Agustín, de Buenaventura y de Tomás de Aquino. A ellos les digo: “¡Ayúdenme!” Luego, la Madre de Dios es siempre y de todos modos un gran punto de referencia. En este sentido, me introduzco en la comunión de los santos. Junto a ellos, revigorizado por ellos, hablo luego con el Dios bueno, sobre todo mendigando, pero también agradeciendo; o simplemente contento. 

Las dificultades
Las había puesto en la cuenta. Pero ante todo sería necesario ser muy cautos con la evaluación de un Papa, así sea significativo o no, cuanto aún está vivo. Sólo en un segundo momento se puede reconocer cual lugar, en la historia en su conjunto, tiene una determinada cosa o persona. Pero que la atmósfera no habría sido siempre alegre era evidente en consideración de la actual constelación mundial, con todas las fuerzas de destrucción que existen, con todas las contradicciones que en ella viven, con todas las amenazas y los errores. Si hubiera seguido recibiendo solamente consensos, habría tenido que preguntarme si de verdad estaba anunciando todo el Evangelio.

El shock de los abusos
El hecho no me ha tomado por sorpresa del todo. Estando en la congregación para la doctrina de la fe me ocupé de los casos estadounidenses; había visto montarse la situación en Irlanda. Pero las dimensiones de todos modos fueron un shock enorme. Desde mi elección para el solio pontificio me había reunido repetidas veces con víctimas de abusos sexuales. Hace tres años y medio, en octubre del 2006, en un discurso a los obispos irlandeses les había pedido “establecer la verdad de lo que ha ocurrido en el pasado, tomar todas las medidas proporcionadas para evitar que se repita en el futuro, asegurar que los principios de justicia sean plenamente respetados y, sobre todo, curar a las víctimas y a todos aquellos que fueron golpeados por estos crímenes anormales”. Ver el sacerdocio repentinamente ensuciado de este modo, y con ello también la misma Iglesia católica, ha sido difícil de soportar. Pero en aquel momento era importante no dejar de mirar el hecho de que en la Iglesia el bien existe, y no solamente estas cosas terribles.

Los medios de comunicación y los abusos
Era evidente que la acción de los medios no estaba guiada solamente por la búsqueda de la verdad, sino que existiera también el gusto de poner en la picota a la Iglesia y, si fuera posible, desacreditarla. Y sin embargo era necesario que quedara en claro esto: mientras que se trate de llevar a la luz la verdad, debemos saber reconocer los hechos. La verdad, unida al amor entendido correctamente, es el valor número uno. Y luego los medios de comunicación no habrían podido dar estos informes si no hubiera existido el mal en la misma Iglesia. Los otros han podido dirigir el mal contra la Iglesia sólo porque este ya estaba dentro de ella.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Las palabras del Papa sobre el preservativo, en el libro "Luz del Mundo".

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Con su viaje a África en marzo de 2009 la política del Vaticano en relación con el sida quedó una vez más en el mira de los medios. El veinticinco por ciento de los enfermos de sida del mundo entero son tratados actualmente en instituciones católicas. En algunos países, como por ejemplo en Lesoto, son mucho más del cuarenta por ciento. Usted declaró en África que la doctrina tradicional de la Iglesia ha demostrado ser un camino seguro para detener la expansión del VIH. Los críticos, también de las filas de la Iglesia, oponen a eso que es una locura prohibir a una población amenazada por el sida la utilización de preservativos.

“El viaje a África fue totalmente desplazado en el ámbito de las publicaciones por una sola frase. Me habían preguntado por qué la Iglesia católica asume una posición irrealista e ineficaz en la cuestión del sida. En vista de ello me sentí realmente desafiado, pues la Iglesia hace más que todos los demás. Y sigo sosteniéndolo. Porque ella es la única institución que se encuentra de forma muy cercana y concreta junto a las personas, previniendo, educando, ayudando, aconsejando, acompañando. Porque trata a tantos enfermos de sida, especialmente a niños enfermos de sida, como nadie fuera de ella.
He podido visitar uno de esos servicios y conversar con los enfermos. Ésa fue la auténtica respuesta: la Iglesia hace más que los demás porque no habla sólo desde la tribuna periodística, sino que ayuda a las hermanas, a los hermanos que se encuentran en el lugar. En esa ocasión [vuelo a África en marzo de 2009] no tomé posición en general respecto del problema del preservativo, sino que, solamente, dije -y eso se convirtió después en un gran escándalo-: el problema no puede solucionarse con la distribución de preservativos. Deben darse muchas cosas más. Es preciso estar cerca de los hombres, conducirlos, ayudarles, y eso tanto antes como después de contraer la enfermedad.
Y la realidad es que, siempre que alguien lo requiere, se tienen preservativos a disposición. Pero eso solo no resuelve la cuestión. Deben darse más cosas. Entretanto se ha desarrollado, justamente en el ´ambito secular, la llamada teoría ABC, que significa: “Abstinence-Be faithful-Condom!” [Abstinencia-Fidelidad-Preservativo], en la que no se entiende el preservativo solamente como punto de escape cuando los otros dos puntos no resultan efectivos. Es decir, la mera fijación en el preservativo significa una banalización de la sexualidad, y tal banalización es precisamente el origen peligroso de que tantas personas no encuentren ya en la sexualidad la expresión del amor, sino sólo una suerte de droga que se administran a sí mismas. Por eso, la lucha contra la banalización de la sexualidad forma parte de la lucha por que la sexualidad sea valorada positivamente y pueda desplegar su acción positiva en la totalidad de la condición humana.
Podrá haber casos fundados de carácter aislado, por ejemplo, cuando un prostituido utiliza un preservativo, pudiendo ser esto un primer acto de moralizacion, un primer tramo de responsabilidad a fin de desarrollar de nuevo una consciencia de que no todo está permitido y de que no se puede hacer todo lo que se quiere. Pero ésta no es la auténtica modalidad para abordar el mal de la infección con el VIH. Tal modalidad ha de consistir realmente en la humanización de la sexualidad.

¿Significa esto que la Iglesia católica no está por principio en contra de la utilización de preservativos?
Es obvio que ella no los ve como una solución real y moral. No obstante, en uno u otro caso pueden ser, en la intención de reducir el peligro de contagio, un primer paso en el camino hacia una sexualidad vivida de forma diferente, hacia una sexualidad más humana.
(Facilitado por Zenit.org).

martes, 23 de noviembre de 2010

"Luz del Mundo", nuevo libro-entrevista del Papa Benedicto XVI


La estrategia de la "Librería Editrice Vaticana" en el lanzamiento del libro-entrevista del Papa (foto de la portada italiana) ha dejado perplejos a más de uno  Las anticipaciones sobre el contenido del libro, publicadas por L’Osservatore Romano y relanzadas por la prensa general (en este caso, centradas en la cuestión del preservativo), se han “comido” -informativamente hablando- al consistorio y han provocado una notable confusión.




Es evidente que la expectación que está levantando el libro es enorme. La primera edición italiana ya está agotada antes de salir. No hay que olvidar, en este caso, que mucha gente que solo lee titulares de prensa puede entender que la Iglesia vuelve a llegar tarde,  que ahora el Papa aprueba el preservativo y mañana aprobará otras cosas que hoy condena…
Es de suponer que, de todas formas, esta confusión tal vez se hubiera producido también después de la publicación del libro.  De hecho, el problema es que resulta muy difícil abordar ese punto públicamente sin ser malentendidos y dar la impresión de que ahora la Iglesia apoya el preservativo. Vale la pena releer las palabras textuales del Papa (en una traducción de Zenit):
"Concentrarse sólo en el preservativo quiere decir banalizar la sexualidad y esta banalización representa precisamente el motivo por el que muchas personas ya no ven en la sexualidad la expresión de su amor, sino sólo una especie de droga, que se suministran por su cuenta. Por este motivo, también la lucha contra la banalización de la sexualidad forma parte del gran esfuerzo para que la sexualidad sea valorada positivamente y pueda ejercer su efecto positivo en el ser humano en su totalidad.
Puede haber casos justificados singulares, por ejemplo, cuando una prostituta [ndr. el original alemán presenta el término masculino] utiliza un preservativo, y éste puede ser el primer paso hacia una moralización, un primer acto de responsabilidad para desarrollar de nuevo la conciencia sobre el hecho de que no todo está permitido y de que no se puede hacer todo lo que se quiere. Sin embargo, este no es el verdadero modo para vencer la infección del VIH. Es verdaderamente necesaria una humanización de la sexualidad".
En siguientes entregas ofreceremos extractos de este maravilloso libro que promete mucho. 

sábado, 13 de noviembre de 2010

Asamblea Diocesana a las puertas


 El próximo lunes 15 de noviembre dará comienzo la IV Asamblea Diocesana de Pastoral. A las 9:00 am, en las instalaciones del Seminario Mayor Diocesano, Mons. Gonzalo de Villa, sj, Obispo de la Diócesis, inaugurará la Asambela. Dios mediante, la concluiremos el miércoles 17 al medio día después de la Santa Misa
Serán días de mutua y serena reflexión. La representación de los diversos grupos, parroquias, sacerdotes, religiosas y catequistas compartiremos experiencias y conocimientos que ayudarán a la concreción y lanzamiento del Plan Diocesano de Pastoral. 
Pedimos luces al Espíritu Santo para que siga guiando a esta Iglesia particular por los caminos de una continua renovación pastoral, fruto de la conversión personal de cada uno de nosotros. Solamente los auténticos discípulos del Señor son los que realizan y cumplen su mandato misionero.
 

martes, 9 de noviembre de 2010

En el corazón de la Iglesia

 
Desde agosto de este año se encuentran en Roma cuatro sacerdotes de nuestra Diócesis haciendo estudios eclesiásticos. En efecto, en la Ciduad Eterna se encuentran el P. Tomás Bartolomín, el P. Juan Pablo Poz (ambos en la fotografía), el P. Bartolo Chavajay y el P. Tulio Omar Pérez. Cada uno de ellos se especializa en un campo concreto, así el P. Tomás estudia Patrología, el P. Juan Pablo estudia Teología Pastoral, el P. Bartolo estudia Filosofía y el P. Tulio estudia Liturgia. Cada uno asiste a una Universidad Pontificia diferente, pero esto no ha sido obstáculo para que de vez en cuando puedan reunirse y compartir sus experiencias romanas y también un poco de nostalgia por nuestras tierras. 
Los estudios que ellos realizan son también una actividad pastoral. En las diversas materias que cursan, en la atención debida a cada clase y en el silencio investigativo de la Biblioteca, ellos se forman para después servir mejor a la Diócesis. 
Por tanto, podemos hablar que su estancia en Roma es formativa. Allí no solamente aprenden contenidos académicos, sino también aprenden de la Iglesia, en el corazón de la Iglesia. Tienen un contacto privilegiado con la universalidad de la Iglesia, vivida "a la sombra de Pedro". 
Desde la Diócesis les acompañamos con nuestra oración. No están solos. Los esperamos con mucha ilusión y con ganas de aprender de la "romanidad" de la que ahora se empapan.
 

lunes, 1 de noviembre de 2010

2 de noviembre. Conmemoración de los fieles difuntos


En la Iglesia celebramos hoy, 2 de noviembre, la conmemoración de los fieles difuntos. La Iglesia, como buena Madre, ha celebrado el día 1 a sus hijos que han llegado a la Jerusalén celestial. Hoy pide por todos sus hijos que han muerto en el Señor y necesitan de purificación para entrar en la Gloria.

A todos nos preocupa la muerte, sin embargo, para los cristianos no debe ser motivo de angustia y desesperación. A través de la muerte, el hombre consigue llegar a su fin último que es volver a Dios de quien procede. Sabemos que un día vamos a resucitar con Cristo, pero para esto es necesario "dejar este cuerpo para ir a morar cerca del Señor" (2Co 5,8).

La muerte es el final de la vida terrena. Nuestras vidas están sometidas al tiempo, en el cual cambiamos, envejecemos y, como todo ser vivo, tenemos un término, que es la muerte. Ante esta realidad, debemos pensar que contamos con un tiempo limitado para llevar a término nuestra vida y vivir de acuerdo a la voluntad de Dios.
En la muerte, el justo se encuentra con Dios, que lo llama a sí para hacerle partícipe de la vida divina. Pero nadie puede ser recibido en la amistad e intimidad de Dios si antes no se ha purificado de las consecuencias personales de todas sus culpas. La Iglesia llama Purgatorio a esta purificación final de los elegidos, que es completamente distinta del castigo de los condenados. La Iglesia ha formulado la doctrina de la fe relativa al Purgatorio sobre todo en los Concilios de Florencia y de Trento.

De aquí viene la piadosa costumbre de ofrecer sufragios por las almas del Purgatorio, que son una súplica insistente a Dios para que tenga misericordia de los fieles difuntos, los purifique con el fuego de su caridad y los introduzca en el Reino de la luz y de la vida.
Los sufragios son una expresión cultual de la fe en la Comunión de los Santos. Así, la Iglesia que peregrina, desde los primeros tiempos del cristianismo tuvo profundo conocimiento de esta comunión de todo el Cuerpo Místico de Jesucristo, y así conservó con gran piedad el recuerdo de los difuntos, y ofreció sufragios por ellos, "porque santo y saludable es el pensamiento de orar por los difuntos para que queden libres de sus pecados" (2 Mac 12,46)". Estos sufragios son, en primer lugar, la celebración del sacrificio eucarístico, y después, otras expresiones de piedad como oraciones, limosnas, obras de misericordia e indulgencias aplicadas en favor de las almas de los difuntos.

En nuestra diócesis recordamos de manera particular a todos aquellos hermanos nuestros que fallecieron en los deslaves de San Antonio Palopó, Nahualá, Santa Catarina Ixtahuacán, Tecpán, Santa Apolonia, Panabajal (Comalapa). De forma especial recordamos también a don Francisco Casiá, papá del P. Jorge Luis Casiá, a doña Teresa Cifuentes, mamá del P. Juan Carlos Sochón, a doña Matilde Serech, mamá del P. Fermín Ajtzalán, a la hermana del P. Bartolomé Calel y al P. Vicente Planells, O.C.D., quienes este año partieron a la casa del Padre.


Requiem aeternam dona eis Domine, et lux perpetua luceat eis.